Tlaquepaque, pueblo mágico; tiene un gran historia que contar, pues ya había habitantes desde la época prehispánica: Se sabe que cuando llegaron los primeros colonizadores españoles, Tlaquepaque pertenecía al Reino de Tonalá quien estaba gobernado por la Reina Cihualpilli.

Durante el siglo XVI (1501-1600)  había muy pocos habitantes y todos eran indígenas, además de que la población disminuyo debido a las epidemias  y al menos para el año 1600 solo había 100 habitantes aproximadamente

Ya durante la colonia iniciaron su construcción algunos de sus edificios más importantes como son los dos templos, el santuario de Nuestra señora de la Soledad y la Parroquia dedicada al Santo Patrono del Pueblo, San Pedro quien fue llamado así por Fray Antonio de Segovia, por lo que su nombre actual San Pedro Tlaquepaque, es la unión del nombre de su Santo Patrono con su nombre prehispánico “Tlaquepaque” que su traducción más literal es “Lugar sobre lomas de Barro”

Sus primeras casonas se construyeron ya en la segunda mitad del siglo XVIII (1750-1800) y los primeros españoles empezaron hacer sus casas de verano. Pero ya es el siglo XIX (1801-1900) cuando ocurren varios sucesos importantes, entre ellos que el 13 de Junio de 1821, el general Pedro Celestino negrete firma la adhesión al plan de igual, en la que se suma a la consumación de la independencia. También durante las guerras de Reforma se les dio asilo a muchos habitantes de Guadalajara, que sufrieron el sitio de la ciudad

También en este siglo se construyen varios edificios importantes como el Parían y El Refugio y durante el Porfiriato las familias adineradas venía a Tlaquepaque como sus casas de Verano, además de que instalo el tranvía Guadalajara-Tlaquepaque.

Ya en el siglo XX (1901-2000), en el año de 1941 se filmó la famosa película “¡Ay Jalisco no te rajes!” protagonizada por Jorge Negrete y por la música del Don Manuel Esperón, también fue en este siglo que construyo el jardín hidalgo, se inauguraron varios museos como el Museo Regional de Cerámica, Casa del Artesano y el Pantaleón Panduro, que muestran una colección de piezas artesanales y en el caso de este último, piezas ganadoras del Premio Nacional de Cerámica que se lleva a cabo desde el año de 1977

Actualmente gracias a la belleza de su sitio histórico y la larga tradición alfarera, fue nombrado pueblo Mágico el 11 de Octubre del 2018.